Pese a que ya son cientos las webs y bitácoras que se hacen eco de la noticia, he decidido colgar este pequeño artículo, no con carácter informativo, sino como pequeño homenaje a un hombre que, pese a que quizás no sea conocido por el gran público, ha hecho más por el cine que todos los directores, productores y estudios juntos. Y es que el día 15 de este mismo mes falleció Stan Winston, mago de los efectos especiales y uno de los hombres más trabajadores de la profesión.Stan Winston empezó a trabajar en efectos especiales y de maquillaje a finales de los años 70, y desde entonces demostró su maestría en filmes tan insignes como Aliens, Predator, la saga Terminator, Batman Vuelve, Jurassic Park o la más reciente Iron Man. Con esfuerzo y trabajo duro se convirtió en un icono de los efectos especiales, creando una exitosa empresa, Stan Winston Studio, e incluso su propia línea de cómics y merchandising.
Pero, tristemente y a pesar de todos sus triunfos profesionales, Stan no pudo ganar la batalla que llevaba siete años librando contra el cáncer de medula ósea que acabo quitándole la vida a sus 62 años de edad. Sirvan estas pobres palabras como sincero homenaje a un hombre que llevaba más de 30 años regalando ilusión a los espectadores de todo el mundo, y que deja tras de sí un legado sólo comparable al de Ray Harryhausen. Muchas gracias por todos esos grandes momentos que nos has brindado, Stan. Y buen viaje.
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