Crítica: Noche en el Museo

Después de enterarme de que David S. Goyer ha sido sustituido por Shawn Levy al frente del proyecto de The Flash, decidí ver su última película: Noche en el Museo.

Realmente iba con pocas esperanzas, más que nada por los precedentes (El señor Levy es el responsable de truñacos como Doce en Casa o Recién Casados). Sin embargo, debo decir que Noche en el Museo me ha gustado, no por ser una gran película, sino porque derrocha imaginación y buen hacer.

El reparto en general está muy bien seleccionado, haciendo especial hincapié en Ben Stiller, quien lleva en todo momento el peso de la película con un resultado bastante decente. Destaca también Robin Williams interpretando a una estatua de cera de Teddy Roosevelt. Totalmente hilarante.

El film cuenta con unos efectos especiales muy logrados y un guión que, sin ser demasiado original, resulta entretenido y en ocasiones hasta emotivo.

Noche en el Museo es una película que gustará a niños y adultos. Una opción recomendable a la espera de los platos fuertes que nos aguardan este año, como Ghost Rider o Spider-man 3.